Para este ejercicio necesitamos dos elementos:
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| Almohadilla de 3 cm de grosor |
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| Pelota de espuma del tamaño de una de tenis |
Tumbados boca arriba colocaremos la almohadilla bajo nuestra cabeza , de esta forma conseguimos una ligera flexión de la misma que hace que nuestras cervicales se estiren.
Observad que el punto de apoyo máximo de la cabeza coincida por delante con el centro del entrecejo. El mentón, barbilla, se acerca en esta postura al esternón, pecho.
La pelota la colocaremos debajo del sacro.
Vamos hacer el ejercicio primero con las piernas flexionadas apoyados en la planta de los pies.
¿Tenéis la postura?
Ahora nos fijaremos en la respiración; al inspirar nos concentraremos en el punto de la cabeza sintiendo como hace presión sobre la almohadilla y dejaremos que la pelota del sacro gane volumen, como si fuera un pequeño globo. Al expirar el sacro presiona hacia el suelo, imaginamos que la pelota se deshincha y la cabeza relaja la presión siendo ahora la almohadilla la que parece hincharse.
Importante las caderas no se mueven, los glúteos, nalgas en ningún momento se separan del suelo.
Recomiendo dedicarle a este ejercicio 15 minutos, antes de dormir. Intentado distender, aflojar, el resto del cuerpo. Ganando profundidad en la respiración.
Espero se entienda....
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